La integración sensorial se refiere a la manera en la que nuestro sistema nervioso recibe y responde a estímulos provenientes de nuestros sentidos.
Toda la información que requerimos para realizar acciones cotidianas se obtiene por medio de vías sensoriales. Éstas son las fuentes primarias de toda función superior que queramos realizar.
El cerebro es el responsable de integrar todos los estímulos y crear aprendizajes, conductas, emociones y reacciones. Gracias a estos procesos, el ser humano es capaz de aprender, jugar, adaptarse a su ambiente, sentir e interpretar emociones, manejar, etcétera.
Cuando la información proveniente de las vías sensoriales no se logra organizar en respuestas apropiadas, ésta se ve reflejada en la vida del individuo, afectando sus actividades y rutinas diarias. Las conductas parecen estar fuera de lugar y es difícil comprender el origen del comportamiento negativo. Cuando esto sucede, es factible que nos estemos enfrentando a un caso de
SPD (sensory processing disorder).